Al final los días de borrasca nos dieron una tregua y pudimos disfrutar de un cielo sin Luna totalmente despejado. Le costó un poco, pero a partir de las 22:30 las nubes decidieron echarnos un cable con el maratón Messier.
Comenzamos por los Messier de invierno más espectaculares como M42 (la gran nebulosa de Orión) o M45 (las Pléyades). Observamos también las dos galaxias vecinas alojadas en la Osa Mayor M81 y M82. Fue gratificante ver como prácticamente todo el mundo distinguía las características nubes oscuras que atraviesan M82. Pero la galaxia más atractiva de la noche fue M51 ya que podíamos apreciar sus brazos espirales y su galaxia satélite. Os gustaron muchísimo los cúmulos globulares como el precioso M3.
Estuvimos hasta las 4:00 de la madrugada observando objetos Messier pero no nos olvidamos de Júpiter, al que pudimos apreciar una preciosa mancha roja.
Lo pasamos genial durante la cena así como en los momentos de descanso y “descongelamiento general” (estuvimos a -1 grados) que aprovechábamos para tomar un chocolate con pastas… 🙂
Incluso dos de los asistentes, Alfredo e Isidro, acoplaron su cámara a uno de nuestros telescopios para fotografiar la nebulosa de Orión. Un recuerdo estupendo que les hizo muchísima ilusión.
¡Muchas gracias a todos!, fue un placer enseñaros parte de los astros más atractivos del catálogo Messier y compartir una noche de afición apta para valientes en estas noches frías de marzo.